El agua se ingiere como parte de la dieta, se utiliza para el riego de cultivos, para el lavado y limpieza de los alimentos durante su preparación y, además, es parte esencial de muchos productos alimentarios. La presencia de virus entéricos humanos (por ejemplo, norovirus humano, virus de la hepatitis A y E, etc.) en agua está bien documentada pudiendo representar una importante amenaza para la salud del consumidor.

Actualmente, la detección de virus entéricos humanos en aguas se basa en el uso de métodos moleculares. Aunque estas técnicas son las más específicas y sensibles entre las disponibles, no informan sobre la potencial infectividad de dichos patógenos. Recientemente, técnicas moleculares cuantitativas (RT-qPCR) acopladas a marcadores de viabilidad han abierto una oportunidad para obtener información sobre la integridad de la cápside viral y así poder inferir la infectividad.

El objetivo principal del proyecto es poner a punto un método molecular de viabilidad para el virus de la hepatitis E (VHE) para la detección y cuantificación de virus potencialmente infecciosos en muestras de aguas residuales, regeneradas, de consumo y embotelladas y así estimar el riesgo para el consumidor.

En primer lugar, se optimizarán procedimientos para concentrar VHE en muestras de agua residuales, regeneradas, de consumo y embotelladas. Se evaluará la recuperación y se definirán los límites de detección de cada método propuesto. Por otro lado, se pondrán a punto métodos de viabilidad acoplando técnicas moleculares (RT-qPCR) con marcadores de viabilidad. De este modo, se podrá estimar no sólo la presencia/ausencia de VHE en distintas tipologías de muestras de agua, sino también la concentración de VHE y su potencial infectividad, permitiendo evaluar la eficacia de las plantas de tratamiento de aguas para reducir la carga viral en las aguas regeneradas.